Me han despedazado de dentro a fuera,de a fuera a dentro. Oigo a los pájaros pero ya no es el mismo sonido,me pesa el pecho, los párpados, las manos no pueden sostenerme y los dedos son cómo pezuñas de hierro que me echan hacia el suelo. Veo el sol,las nubes,el mundo cayendo.
Hablábamos tanto del futuro,que todo se quedó en ayer.
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